“Con una misa solemne se conmemoraron 25 años de la Fundación Unidad social San Luis María de Montfort en sus instalaciones

ubicadas en el municipio de Choachí.

Al evento asistieron varios jerarcas de la iglesia católica, la comunidad montfortiana de religiosos y religiosas y sus más cercanos colaboradores.

Con un gran almuerzo los 45 ancianos que viven en la Fundación celebraron el cumpleaños del hogar que los alberga

y posteriormente aquellos de más bajos recursos recibieron donaciones de los visitantes.

La Fundación dirigida por las Hermanas de la Sabiduría fue creada por el P. José Ricaurte Motta con la colaboración de Doña Margarita Hurtado de Gómez, labor que actualmente continua doña Margarita Escobar de Gómez.

Era el año 1974 cuando el Padre montfortiano José Ricaurte Motta Blanco que vivía en el seminario salió a las calles en busca de recursos para hacer unos galpones para sus pollos

y unas cocheras para los cerdos jamás se imaginó que terminaría construyendo una esperanza para los ancianos más pobres de la región.

Bodas de plata – fusmont

Se encontró en esa oportunidad con cuatro ancianos desamparados y vestidos con harapos. Se trataba de “Pandereta” su germana Sagrario, Ana Lucía y el señor Vidal quienes vivían en el sótano de la casa cural del pueblo

y quienes sembrarían en él la inquietud de realizar la obra más bondadosa de su vida.

Fue en ese momento cuando el P. Motta se preguntó: ¿cómo era posible que él estuviera construyendo un lugar para los animales mientras sus

hermanos estaban deambulando en las calles sin nadie que les diera de comer durmiendo en el suelo? Su idea inicial cambió abruptamente.

Se armó de coraje y empezó a conseguir con las almas caritativas del lugar un lote donde construir el lugar para los ancianos.Después de muchas visitas alguien le donó el terreno donde en 1975 se puso la primera piedra de lo que hoy es la Fundación Unidad Social San Luis María de Montfort.

A partir de entonces organizó su primera rifa pro fondos del ancianato con una gallina y 14 pollitos donados por otra de esas almas caritativas. A esa actividad le siguieron bazares, donaciones y chocolates.

Pero los sueños del Padre Motta iban más allá a pesar de no contar con recursos suficientes quería brindar ayuda en salud

a toda la comunidad que para entonces no contaba más que con humilde puesto de salud.

Luego de mucho perseverar y con la colaboración de doña Margarita Hurtado de Gómez pudo conformar un gran centro médico que ofrecía servicios de hospitalización y consulta externa

bajo la atención de un médico rural pagado por el entonces gobernador de Cundinamarca, Gabriel Melo Guevara.

De esta manera la obra ya terminada fue entregada a la comunidad el 11 de Junio de 1978 desde cuando viene brindando

los ancianos especialmente de bajos recursos los más tiernos cuidados de acuerdo con la filosofía de la comunidad montfortiana.

Pero 16 años más tarde ante dificultades económicas la Fundación tuvo que cerrar la prestación de servicios médicos incluso para los mismos ancianos que residían allí dado que la ley 100 prohibió destinar recursos del Estado

para entidades privadas hecho que llevó a no disponer de recursos para continuar pagando el galeno y demás personal médico que trabaja por los ancianos..

Ante estas vicisitudes las Religiosa de la comunidad de las Hermanas de la Sabiduría que cuidan a los ancianos desde

que se inició la obra se convirtieron en enfermeras capaces de brindar atención en lo referente a la terapia respiratoria, primeros auxilios y realización de electrocardiogramas”… Artículo del Nuevo Siglo Año 2004 11

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